lunes, 16 de junio de 2014

La bici o la vida (I)

Soy un fanático de la bicicleta en toda la extensión del término. La uso casi a diario,la cuido lo mejor que puedo y siempre estoy pendiente de la próxima salida. No importa si es una vía verde a tope de alforjas o un paseo hasta la biblioteca,el medio es claro: dos ruedas,un cuadro, y dos pedales.

Cómo será la cosa que la mía hasta tiene nombre,y de boato para más señas. Se llama nada menos que Jollie Jumper, por el caballo de aquel héroe llamado Lucky Lucke. Vale que tiene menos apoyos y menos brío (solo el que mis piernas son capaces de imprimirle,que tiende a no ser demasiado). Pero la libertad que siento encima y el aire en la cara son los mismos. Además,lo mismo hay que cuidar cubiertas que cascos. Y que hacerle ajustes varios,aunque me ahorro los desechos en una feliz circunstancia.

Superados los desvaríos de todo pelo,entremos en harina. Se me ocurren unas cuantas ventajas de las dos ruedas,y pocos (aunque grandes) inconvenientes. Seré eficiente y lo comentaré todo.

Pros:

Precio: Una bici de gama media viene a salir por 400 €,y dura lo que la cuides. Un camara vale un par de euros,y una cubierta decente no más de veinte. Sumando alforjas y demás,por menos de 600 tenemos una solución integral  de desplazamiento (qué profesional queda,oye)

Ligera: ¿Una rampa poderosa? Al hombro. ¿Una escalera inesperada explorando la ciudad? Al hombro.

Versátil: Con la elección adecuada ciudad,monte y carretera no son problema. Puede que combinar todo no resulte en una máquina de sobresaliente en ningún área,pero para un par de notables seguro que da.

Mantenimiento: Fácil como él solo con un poco de formación y una mínimas herramientas.

Divertida. Ecológica. Haces ejercicio.

Llevado por el entusiasmo seguiría hasta mañana con la lista buena,pero como la otra es corta ahí va:

Clima: Cualquier cosa que no sea un día con temperatura templada y nubes sin agua es,cuando menos,incómodo. No obstante,todo es acostumbrarse y tener un fondo de armario surtido en su justa medida.

Carrocería: Eres tú,amigo ciclista. Para lo bueno y para lo malo. Mientras no nos acostumbremos a convivir en todos los terrenos protégete: usa casco,luces,señaliza y anda con mil ojos.

En fin,la bici. Esa gran máquina,que lo mismo da alegrías que desgracias. Y que no solo se usa para divertirse y ponerse a tono,también para cosas serias. Pero eso se queda para la próxima semana.

Un saludo y perdón por el retraso,
Isma

P.D. Los comentarios son obligatorios,las ideas de bombero compartidas son menos graves.